El reto de Garuba y Aldama




La Summer League. Esa competición en la que lo importante no es qué equipo sale vencedor, ni tampoco las sensaciones que pueden dar esas mismas franquicias, si no lo que los jugadores demuestran a sus respectivos cuerpos técnicos siendo esta competición un gran escaparate, además del último escollo para conseguir esos primeros minutos de juego en el que realmente se jugarán buena parte de su carrera NBA. Y es en esa tesitura en la que se encuentran ahora dos de las jóvenes apuestas del baloncesto español.

Usman Garuba y Santi Aldama se han encontrado un ambiente extremadamente competitivo durante estos pasados días. Sí, aún más competitivo que en la NCAA o la Euroliga, donde los profesionales se juegan un título y sus partidos son retransmitidos por todo el globo, teniendo estas competiciones más repercusión que la ya mencionada Summer League. Y es que por supuesto no todos los días se tiene la oportunidad de luchar por lo que se ha soñado desde pequeño en un entorno en el que los rivales no siempre llevan una camiseta diferente a la suya.

Por su parte, Garuba ya conoce qué significa ser jugador profesional en uno de los equipos más importantes del viejo continente en el que ha contado con los mejores mentores. Llull, Rudy Fernández o Felipe Reyes tienen una amplia experiencia a nivel internacional y, por supuesto, el ahora "rookie" puede contar con el testimonio y apoyo de varios NBA que ya pasaron por el club.


En la pelea por hacerse un hueco en Houston cada novato tiene su bagaje y sus cualidades distintivas, por lo tanto, la experiencia antes mencionada de Garuba solo resultará ser una medalla de tiempos pasados si no usa todo lo aprendido durante ese periodo para mostrar su valor en la pista. Y es que, acostumbrado a jugar de 4, con un 2.03 deberá trabajar de manera incansable, o bien para conservar esa posición o bien para reinventarse hacia un jugador de un corte ligeramente más exterior. Por supuesto que el internacional español (no debemos olvidar su participación en los recientes Juegos Olímpicos de Tokio) hasta ahora ha tenido un mayor protagonismo en sus tareas defensivas, y esa cualidad en esta nueva etapa de la liga es altamente valorada por los aspirantes al título jugando a su favor si logra adaptar sus capacidades físicas a las exigencias que presentarán los rivales.

Con la plantilla que actualmente presentan los Rockets, el ex-madridista tendrá que tratar de apurar esa especialización ya que, pese a que la mayor parte de la competencia se centra en los puestos de base y escoltas, tendrá que rascar minutos a Christian Wood; el pasado líder el equipo en puntos (21,0), rebotes (9.6) y porcentaje en tiros de campo (51.4%). La mentalidad, su constante deseo de progresión y comprensión de las necesidades del entrenador será lo que marque la diferencia en su primer año en la franquicia texana.


El recorrido de Santi Aldama es diferente. El hijo del Santiago Aldama, quien participó en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92 enfrentándose al mítico Dream Team, marcó el camino hacia la máxima competición estadounidense al rechazar la oportunidad de jugar en la ACB desde los Canterbury Lions de Gran Canaria y poner rumbo así a Loyola, la Universidad de Maryland, logrando en las dos temporadas que permaneció allí los premios de mejor quinteto rookie y mejor quinteto de la Patriot League respectivamente donde promedió en su último año 21,2 puntos y 10,1 rebotes por partido.

Pese a estos números y reconocimientos, Aldama va a tener que trabajar muy duro para conseguir minutos en unos Grizzlies que se han reforzado de manera consistente con la llegada del ya veterano Rajon Rondo, del fiable Steven Adams y un también experimentado Patrick Beverley apuntando alto en cuanto a las expectativas de la regular season. Por su lado, uno de los competidores más directos por el puesto en la rotación será el sophomore Killian Tillie, pues además de compartir posición en la pista, ha dejado muy buenas sensaciones durante el torneo veraniego y obligará al canario a aprovechar todo lo aprendido en su etapa universitaria.

Durante estos primeros pasos, la capacidad de sacrificio, el incesante trabajo y la habilidad para no amilanarse ante la feroz competición interna será capital para el devenir del futuro del español, porque todos recordamos a un jovencísimo Pau Gasol luchando y reivindicando su sitio en la liga a base de acciones que ponían los pelos de punta hasta el punto de impresionar al curtido Kevin Garnett, quien terminó por darle su merecido crédito al de Sant Boi.

A partir de aquí, todo depende de ellos. Han hecho lo más difícil de todo: destacar en este juego hasta ganarse la oportunidad que cualquier amante de este deporte desearía tener. Y ahora, teniéndolo al alcance de la mano es cuando ambos han de demostrar que han nacido para quedarse en la liga más exigente del mundo donde la dispar fortuna de los jugadores españoles en la NBA servirá para ponerles en sobre aviso, al haber suficientes ejemplos que nos ayudan a esbozar los diferentes escenarios a los que se pueden enfrentar, pues tan sólo se necesita citar algunos nombres como José Calderón, Raül López, Rudy Fernández, Fran Vázquez o Albert Miralles.

Mientras tanto nosotros nos sentaremos a disfrutar de los primeros pasos de estos dos jugadores, quienes ojalá algún día puedan convertirse en los referentes de la siguiente “nueva generación” como ya hicieron sus predecesores.

Post Javi Navarro 

 

 

 

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