El futuro de los banquillos

La experiencia es un grado, pero también la ambición del que acaba de empezar es una virtud. En Europa, existe una joven generación de técnicos que, a pesar de no tener los grandes currículos de los Ancelotti, Zidane, Guardiola, Siemone, Allegri o Conte, están haciendo méritos para realizar el "sorpasso" en los banquillos más potentes de Europa. 

Sin duda, el entrenador más prometedor del mundo ahora mismo, que abandera este cambio es Julian Nagelsmann. A sus 34 años consiguió clasificar al Hoffenheim a la Champions, hacer lo mismo con el Leipzig y, además, llevar a este último a una semifinal de Champions. Empezó a entrenar a los 20 años en categorías inferiores y poco a poco fue creciendo hasta llegar a ser el segundo de Thomas Tuchel en el Augsburgo. Actualmente está disfrutando del hasta ahora mayor título de su carrera: entrenar al Bayern de Múnich. Lidera con tranquilidad la Bundesliga, aunque tuvo un inicio dubitativo y en Europa es una vez más uno de los más serios candidatos al título. Cabe destacar, que con 31 años se le ofreció el banquillo del Real Madrid, y él, lo rechazó. 

Al igual que el entrenador alemán, Ruben Amorim está llamado a ser uno de los grandes entrenadores de la próxima década. Con sólo 36 años está revolucionando el fútbol portugués con un Sporting que hace dos años estaba sumergido en una crisis institucional y ahora es el actual campeón de la Liga NOS. En su primer equipo, el Sporting de Braga, conquistó la Copa de la Liga y fue el principal valedor de Trincao, al que le dio galones antes de fichar por el Barça.

Dentro de la escuela alemana también encontramos a Marcos Rose. Para muchos, el heredero de Jurgen Klopp. Como jugador estuvo a las órdenes del brillante técnico del Liverpool cuando ambos coincidieron en el Mainz, y su estilo como entrenador, está claramente influenciado por él. Empezó dirigiendo la Sub-19 del Salzburgo, con el ganó la Youth League en 2017, mérito de sobra para que en 2018 le hicieran técnico del primer equipo y ganara la liga austriaca. En la 2018-19 fichó por el Gladbach, al que en su primer año clasificó para la Champions. En verano dio un paso más en su carrera y se hizo con los mandos del Borussia Dortmund. 

La Premier League siempre es un claro ejemplo y escaparate del fútbol mundial y en este aspecto no iba a quedarse atrás. Mikel Arteta estuvo un par de años como asistente de Guardiola y eso es como un máster para terminar siendo entrenador de un grande. Después de ser uno de los hombres de confianza del técnico del City, Arteta se marchó en diciembre de 2019 al Arsenal, uno de los clubes de su vida como jugador, que estaba en horas bajas. 2 años después, el español le ha devuelto la identidad al club londinense con un juego vistoso y alegre y acabó levantando la FA Cup, el primer título gunner desde 2017. 

Este año está en la pelea por entrar en posiciones europeas, algo tristemente lejano antes de su llegada al banquillo "gunner". Pero el boom de los nuevos y jóvenes inquilinos en Inglaterra no para. Steven Gerrard tomó las riendas del Aston Villa antes de navidades, después de una corta pero inmejorable carrera al frente del Glasgow Ranger. Graham Potter está haciendo historia en el banquillo del Brighton. Un recién ascendido hace unos años que ahora mismo mira más a posiciones europeas que al descenso. Por último, aunque ahora sin equipo, Frank Lampard hizo una gran labor al frente del Chelsea, previo paso por el Derby Country. En Londres se encontró un equipo joven y en reconstrucción en el que su labor era desarrollar talento. Lo hizo, los resultados no acompañaron, pero ese talento fue campeón de Europa tras su salida. 

En Italia el famoso "catenazzo" se está quedando atrás, y hay dos entrenadores que se están encargando principalmente de ello. Cuando uno miraba la clasificación de la Serie A y veía al Sassuolo segundo en la tabla, alucinaba. El artífice de esa anomalía fue Roberto de Zerbi, que se convirtió en el técnico de moda en Italia. Y eso que sus inicios no fueron nada prometedores: duró tres meses en el Parma y no pudo mantener al Benevento en Primera División. Sin embargo, ahora todo ha cambiado y tras convertir al Sassuolo en uno de los equipos que mejor fútbol practicaba junto a la Atalanta de Gasperini, puso rumbo a Ucrania para entrenar al conjunto del Shaktar. 

Otro de los entrenadores italianos a destacar es Simone Inzaghi. A pesar de su juventud, el actual técnico del Inter es uno de los entrenadores más afianzados en la Serie A. Se hizo con el puesto de entrenador de la Lazio (el club en el que más tiempo jugó como jugador) cuando tenía 39 años, y tras cinco temporadas consiguió ganar una Coppa, dos Supercopas de Italia y clasificó al conjunto capitalino a la Champions después de 13 temporadas. Y todo ello practicando un fútbol vistoso, con jugadores como Luis Alberto, Milinkovic-Savic, Correa, Immobile, Lazzari y Muriel, entre otros. Ahora domina la Serie A y está en octavos de final de la Champions con un fútbol agresivo y muy vistoso.

Por último, por supuesto hay que destacar nuestro país dentro de la gran camada de buenísimos entrenadores que tenemos. El caso más extraño es del de Diego Martínez. Tras clasificar al Granada a la Europa League, un hito sin precedentes para el club nazarí. Diego Martínez, alias El Chamán, se ha convertido por méritos propios en uno de los entrenadores con mejor fama de LaLiga a pesar de su juventud. Pero tras unos malos resultados, aun llegando a cuartos de final con el Granada en Europa League eliminando al Nápoles, su camino y el nazarí se separaron y ahora se encuentra sin equipo. 

Xavi Hernández y Xabi Alonso son los últimos en llegar a los banquillos, influenciados por la magnífica generación de futbolistas campeones del mundo con España en 2010. Xavi es desde hace poco el entrenador del FC Barcelona, y aunque no ha empezado del todo bien, ya se atisban su filosofía e ideal de juego junto a un grupo de jóvenes muy prometedores. Xabi Alonso se encuentra en el Sanse, filial de la Real Sociedad y su buen trabajo no está pasando desapercibido cuando en verano rechazó una oferta de la Bundesliga para seguir en "su casa"y quién sabe si sustituir a Imanol en un futuro al frente de la Real. 

Post Dani Moreno