¿Qué fue de ... Ronaldo Nazario?
O Fenómeno, al día de hoy, tiene acciones del club en el que se formó. Pero además tiene una intensa actividad empresarial en rubros que van desde lo deportivo hasta los bienes raíces. El más conocido actualmente es el proyecto en Valladolid, en el que preside desde 2018 al recién ascendido a 1a división club pucelano.
Con 18 años llegó a Europa y cuando se fue tenía un patrimonio de 170 millones de euros. Puso en marcha diferentes negocios de éxito hasta querer ser dueño del club pucelano.
Cuando Ronaldo Nazario llegó a Europa para jugar en el PSV Eindhoven holandés tenía 18 años y una cuenta corriente que manejaban dos representantes, Pitta y Martins, de dudosa reputación, que vieron en un talento brasileño el negocio para sacarle los cuartos.
No ha sido un camino fácil el que ha tenido que recorrer "El Fenómeno" en el terreno de sus finanzas porque era presa fácil del aprovechamiento de los intermediarios y los dueños de la noche que se aproximaban a la estrella. Dentro del campo era un cohete imparable. Fuera, tenía otro tipo de peligros. Llegó a Holanda con los bolsillos por llenar y cuando se marchó de Europa en 2008, después de dar los últimos coletazos en el Milan en su segunda etapa en Italia, su fortuna era de 170 millones de euros.
Un patrimonio que fue forjando con traspasos a golpe de talonario. Del Cruzeiro pasó al PSV, Barcelona, Inter, Real Madrid y Milan. Sus últimos trotes y algunos que otros goles los dio en su país con el Corinthians. Era una fábrica de hacer dinero en el campo publicitario. Uno de los grandes iconos de Nike en un deporte de masas. Los patrocinadores se lo disputaban porque tenía gancho y el perfil ideal para los profesionales del marketing: liderazgo, genio, espectáculo y estrella. En el Real Madrid, por ejemplo, ganaba más en un año con los patrocinadores (8 millones de euros) que de sueldo (6,5 millones de euros).
A partir de 2010, el crack empezó a fundar compañías como Marketing 9ine, vinculada a la gestión de la carrera de deportistas y artistas; R9 de Gestión Patrimonial y Financiera, y la consultora Tara Sports, que llegó de la mano de la adquisición de la parte mayoritaria del Valladolid. Además, fue patrocinador de la “Fundación Fenómenos”, una ONG que ayuda a comunidades más necesitadas de su país.
Su primera incursión en los negocios llegó en 2011 con la creación de la Agencia de Publicidad "9ine", entre los que empezó a contar con un jovencísimo Neymar para asesorar en materia de imagen. Las inquietudes profesionales le llevaron a vivir en Londres para especializarse en el mundo de la empresa del deporte y el entretenimiento. En este tiempo estuvo asesorado por Martin Sorrel, el presidente de la empresa de servicios de marketing y comunicación "WPP - Wire Plastic Products" del Reino Unido con el que asoció su agencia.
Ronaldo Nazario nunca dejó de estar vinculado al deporte y el fútbol en particular. De "9ine" dio el paso para entrar en el accionariado de otra multinacional enfocada al marketing deportivo de los deportistas y la gestión de la imagen de las estrellas: "Octagon". Entre ellos se encuentra hoy Gabriel Jesús, el delantero brasileño del Arsenal desde este verano. En el Mundial de Brasil, en 2014, fueron muchos los patrocinadores con los que Ronaldo pudo emprender negocios, establecer contactos y seguir creciendo en este sector para ganarse la confianza de los clientes. Paralelamente, en 2014, se interesó en la compra del 20 por ciento de un club de fútbol para ser socio del Fort Lauderdale Strikers. Un club de la North American Soccer League (NASL). Una competición inferior a la Major League Soccer (MLS). La aventura duró dos años.
El éxito y el conocimiento en la industria del deporte rey como jugador, primero, y emprendedor, después, le animó a dar el paso de querer comprar un club de fútbol para empezar a trabajar como directivo. Ronaldo manifestó en la prensa brasileña cuáles eran sus objetivos: “Quiero tener la experiencia de gestionar un gran club. Estoy pensando en comprar algún equipo de Segunda en España o en Inglaterra porque quiero hacer algo innovador y estoy preparado para el desafío”. Desde 2015 lanzó sus redes y contactos para interesarse por clubes en España como el Tenerife, Getafe, Espanyol y Valladolid y en el fútbol chino.
El club elegido fue el Valladolid y el acuerdo de compra se concretó por un montante de 30 millones de euros, con lo que Ronaldo se convirtió en máximo accionista y presidente y Carlos Suárez en consejero delegado. Este último tenía casi el 60 por ciento del accionariado desde que compró un paquete en julio de 2011 derivado de Servicios Blancos S.L. (19,06%), Alda Beta S.L. (19,03 %) y Carteras e Inversiones Somosaguas (20%).
La expectación creció en la ciudad vallisoletana por conocer el desembarco del mediático ex futbolista brasileño. “Ronaldo es un hombre de fútbol. Con solvencia económica acreditada y no tiene un mal perfil”, confirmó con sus palabras el alcalde de Valladolid, Óscar Puente. Uno de los fichajes galácticos de Florentino Pérez y hoy embajador del Real Madrid también, está con ganas de crear un ambicioso proyecto en el Valladolid. Por ahora, ha conseguido subirlo a la categoría de oro del fútbol español de nuevo.
"O Fenômeno" se convirtió también en el máximo accionista del Cruzeiro de Brasil, donde se formó como jugador y se encuentra en la Serie B del fútbol brasileño tras varios años en una crisis futbolística que ha dejado al equipo al borde de la desaparición. Como una de los equipos más grandes e históricos del fútbol de Brasil, Ronaldo compró el 52% del club y pagó 400 millones de reales un equivalente a $70,2 millones de dólares, generando sorpresa en el país carioca por la noticia y, de cierto modo, en España por ser el principal accionista del Valladolid.
Su ultima inversión la hizo junto a Juan Mata y Fernando Llorente. En esta incursión en el 2022, los tres han logrado reformar un edificio español para crear un centro de 74 apartamentos para personas de la tercera edad, que puedan seguir disfrutando de su estilo de vida independiente con todas las comodidades posibles. De ‘O Fenômeno’ a ‘O Empresário.
Post Daniel Moreno
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