FOR (L)EVERKUSEN

“¡Por fin!”. Eso han debido pensar los aficionados del Bayer Leverkusen con la consecución de su primer título en su historia, nada más y nada menos que una Bundesliga. Se pone fin al mito del ‘Neverkusen’, término acuñado por seguidores alemanes con, dejémoslo así, poca devoción por el equipo de la ciudad de Leverkusen. Con ello hacían referencia, de forma burlesca, a los títulos conseguidos por este equipo (0), hasta hoy. Se acaba el mito de ‘Neverkusen’ y nace otro, no sólo en la ciudad alemana, sino también en todo el panorama futbolístico mundial: Xabi Alonso. El tolosarra ha escrito su tesis doctoral en tierras alemanas.

Comenzó su carrera en el Infantil A del Real Madrid, con el que se proclamó campeón de liga. Así, tras declinar una oferta de renovación para hacerse cargo del Juvenil C blanco, llegó a Zubieta, donde se puso a los mandos del filial de la Real Sociedad. Vuelta a casa, y qué mejor sitio que formarse como entrenador en el club que te vio crecer como futbolista. Tras una primera temporada notable, consiguió en la siguiente (20/21) el ascenso a Segunda División con el filial txuriurdin. 

Acabó volviendo a la tercera categoría del fútbol español al año siguiente tras hacer, sin embargo, una gran temporada, con una plantilla cargada de jugadores muy jóvenes, los cuales muchos de ellos compiten actualmente en la Primera División española, como Unai Marrero, Robert Navarro o Beñat Turrientes (Real Sociedad), Álex Sola (Alavés), etc. Competir en una liga complicadísima como la Categoría de Plata española siendo tan joven y enfrentándose a equipos históricos no es nada sencillo, y los pupilos de Xabi cumplieron notablemente a pesar de perder la categoría.

Alonso partió a Leverkusen, tras no renovar con la Real, en octubre de 2022, sustituyendo al por entonces preparador suizo Gerardo Seoane. El equipo, tras clasificarse la temporada anterior para la Champions League, marchaba en puestos de descenso. Tras un inicio complicado, Xabi le dio la vuelta a la situación. En mi retina quedará siempre ese Atlético de Madrid-Bayer Leverkusen. 

Ambos se jugaban ser terceros de grupo y pasar a la Europa League. Salió victorioso el equipo alemán. No sin que, en la última jugada del partido, el Atleti fallara un penalti y los dos rechaces posteriores. Increíble. Seguramente, el equipo de Xabi dio ahí un paso adelante en términos de confianza futbolística. Así, tras un inicio difícil, el preparador tolosarra metió a su equipo en la Europa League al final de su primera temporada. Sin embargo, nadie se esperaba lo que iba suceder al año siguiente.

El Bayer armó un equipo muy competitivo, con jugadores ya contrastados y otros muy jóvenes, como Florian Wirtz, Victor Boniface o Jeremie Frimpong. Sin perder ni un partido, ya han cantado el alirón en liga, batiendo al todopoderoso Bayern de Múnich, el cual no le ha ganado esta temporada. Además, el equipo está en la final de la Copa alemana, en la que se enfrentará al Kaiserlautern, de la segunda división alemana. Por si fuera poco, el equipo alemán jugará las semifinales de la Europa League frente a la Roma. Esto significa que el equipo dirigido por Xabi opta al triplete, y teniendo en cuenta su dinámica, no es ninguna utopía que lo logre.

Ha salvado el invicto de forma milagrosa en algunos partidos, remontando resultados adversos en el descuento, empatando a finales de encuentros que parecían perdidos, etc. Son 45 los partidos disputados esta temporada por el conjunto alemán esta temporada y, si juntamos la racha ganadora que cogió al final de la temporada pasada, son 49 los partidos que lleva sin perder. Qué caprichoso es este deporte: el último equipo que batió a los germanos fue precisamente la Roma de José Mourinho (su rival en semifinales europeas en la presente edición). Hablamos de mayo de 2023. Es decir, prácticamente un año sin conocer la derrota. Ya lo advirtió el entrenador portugués cuando le preguntaron sobre los futuros entrenadores de renombre que habría en el panorama futbolístico: “creo que, por condiciones y por entrenadores que ha tenido, Xabi Alonso será un gran técnico”. Aquella frase se remonta a 2019. La bola de cristal del portugués.

El técnico de Tolosa ha hecho de su Bayer un equipo dominante, disfrutando de una posesión notoria de balón, pero con un juego versátil, vertical y eléctrico. La profundidad de sus carrileros Frimpong y Grimaldo (qué futbolista), el control que aportan Xhaka y Palacios, la magia y creatividad de Wirtz o los goles de un sorprendente Boniface han deslumbrado a un fútbol europeo que, ni en los mejores sueños de los aficionados de Leverkusen, podrían imaginar lo sucedido esta temporada.

Con la Bundesliga ya conseguida, el conjunto alemán otea en su horizonte la final de Copa y las semifinales europeas. “¡Qué no se acabe nunca esta temporada!”, pensarán sus aficionados. Estamos disfrutando mucho del juego del Bayer y, mientras siga siendo Xabi Alonso su entrenador (ha renovado hasta 2026), parece que nos divertiremos viendo sus partidos. Muchos grandes ya han llamado a su puerta (Liverpool o Bayern de Múnich, por ejemplo). El tolosarra todavía tiene que seguir creciendo como entrenador, pero parece que su llegada a un grande parece inevitable a medio plazo. ¿Se imaginan a Xabi dando instrucciones en la banda de Anfield o en el Santiago Bernabéu? Yo sí.

¡Larga vida a Xabi!

Miguel Jiménez // @migueljh1