The Phoenix Without Suns: Nuevo fracaso de Kevin Durant

Personalmente, no me gusta ver la palabra fracaso relacionada con el deporte, ya sean deportes minoritarios o deportes que mueven millones, ya que cualquier deportista pierde más títulos de los que gana, y basándonos en la NBA, solo hay un equipo que llega a levantar el trofeo Larry O’Brien por temporada, dejando por el camino a muchos equipos/jugadores con ese mismo objetivo, y que, por diferentes motivos, les tocará volverse a preparar lo mejor posible para volver a intentarlo.

Pero los últimos años de Kevin Durant, con sus traspasos y reclutamiento de jugadores sin un mínimo de éxito y continuidad, está haciendo que me cueste separar esta palabra tan fea en ámbito deportivo de sus movimientos y resultados derivados de sus decisiones.

Partiendo de que dejó Oklahoma tras perder la final frente a los Golden State Warriors… para unirse a los Warriors, dejando en la estacada a Westbrook y Harden, un big three que quien sabe si hubieran ganado algún anillo siguiendo todos en OKC.

Hizo gala de la expresión: "si no puedes con el enemigo, únete a él".

Allí sí que pudo saborear el sabor del triunfo, pero como dicen sus detractores, cuando se retire, le faltará ganar un anillo siendo la pieza angular del proyecto, ya que salió campeón con una estructura muy sólida de Golden State (Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green, y Kerr como entrenador), que no nos olvidemos, ganaron antes de la llegada de Durant, ganaron durante la estancia de Durant, y también lograron ganar tras la marcha de Durant. Quitando un poco de valor a lo conseguido por KD.

Primero puso rumbo a los Brooklyn Nets, convirtiéndose en la primera espada y el jugador por el que construir un proyecto, al que se le unieron su excompañero en Oklahoma, James Harden y al más habilidoso de la NBA actual (un ejemplo es su último partido frente a los Clippers), Kyrie Irving, pero por diferentes razones, no lograron estabilidad ni minutos con los 3 en pista y tan rápido como se formó este big three, también se disipó, abandonando los 3 el barco de los Nets tras hipotecar la franquicia, que pasaron de soñar con el anillo a esperar entrar pronto en play-offs.

Tras su nefasto paso por los Nets, siendo incapaz de liderar un proyecto, y pidiendo el traspaso antes de ni siquiera intentarlo, puso rumbo a los Phoenix Suns de Booker, Ayton y Paul, unos Suns que pasaron la primera ronda contra Los Angeles Clippers y cayeron ante los campeones, Denver Nuggets.

Este traspaso, junto con el de Bradley Beal, supuso, a priori, un salto de calidad para intentar acercarse a la lucha por el título, pasando del Ayton-Booker-Paul, a un Durant-Booker-Beal, añadieron anotación sin mirar que necesitaba el equipo realmente.

Sobre la mesa, sonaba bien, y en la cabeza del general manager imaginamos que también, ya que hicieron un all-in, pero lo que no se pensaban, es que Beal estaría lejos de su mejor versión, y que, con tal desembolso a nivel de salarios, tendrían un banquillo tan escaso que al final te deja en cada partido sin alternativas, sin nadie de revulsivo, y sin complementos que te mantengan en el partido solventando las alternativas que te marcan los rivales.

Además, queda claro que no se han sabido compenetrar bien, ya que estamos hablando de 3 anotadores feroces, y si bien es cierto que Durant y Booker no han desentonado, no puedes intentar ganar un anillo juntando solo a 3 anotadores sin variantes como protectores del aro, defensores exteriores, tiradores de esquina o un organizador puro que te lleve el tempo del partido acorde a tus intereses.

Para poner el ejemplo contrario, sus rivales en esta primera ronda, los Minnesota Timberwoles, fueron a por Rudy Gobert y mucha gente los llamó locos por lo que ofrecieron, pero al final es un big three bien compensado, Gobert ordena toda la defensa y aporta rebote ofensivo, además de algunos puntos si saltan las ayudas y se olvidan de él, tienen a Towns que es un 4 abierto con buena mano, que puede jugar por dentro y por fuera según el rival.

Además sumado a que es buen defensor tanto por fuera como por dentro, sobre todo con la ayuda cercana de Gobert, y para terminar, la punta del iceberg, un jugador llamado a ser la cara de la NBA, Anthony Edwards, que este año ha dado un paso de gigante para liderar este proyecto, agresivo en ataque y decisivo atrás, solo hay que recordar el robo de balón a Paul George o el tapón a falta de un segundo golpeándose la cabeza con el tablero, jugador diferencial y rodeado de lo que potencia su juego y disminuye sus carencias.

Y esta es la diferencia de juntar a 3 estrellas de anotación, o a 3 estrellas cada una con su función para ser lo más completo posible. Provocando que hemos visto la primera barrida de estos play-offs, sacando la escoba a pasear y provocando un eclipse en el logo de estos Phoenix, que tras este bochornoso 4-0, The Phoenix Without Suns tendrán que replantearse muchas cosas de cara a la temporada que viene.

Su verano viene marcado por limitaciones

Lo primero de todo es ver si buscara salida a alguna estrella, o si mantienen a los 3, ya que actualmente tienen 7 jugadores con contrato, y solo con estos 7 jugadores ya suman 195 millones de dólares, superando el limite salarial, que está en 171 millones de dólares, además, si los jugadores con opciones de jugador las ejercen, se plantarían con 11 jugadores y 205 millones de dólares en salarios.

Para ver lo mal gestionada que está la plantilla, solo basta con ver que el único interior es Nurkic, además de no contar con ningún base puro en plantilla y una apuesta de 3 estrellas con un perfil similar (jugadores que necesitan el balón para buscar su tiro), de ahí que veamos a Booker con sus mejores números en asistencias, ya que alguien tiene que cambiar su rol para intentar funcionar, pero ni por esas.

Un dato más para ver cómo pueden afrontar la próxima temporada, es ver en que escala de apron (límite de la tasa de lujo más 4 millones) sobrepasan el limite salarial, ya que según el dinero sobrepasado, tienes unas limitaciones u otras, y estos Suns están en el segundo apron, solo pueden conseguir agentes libres de dos opciones: manteniendo a un jugador suyo que salga a la agencia libre, o firmando un nuevo agente libre por el mínimo salarial, lo que les puede llevar a sobrepagar por un agente libre suyo con tal de tener a alguien más sentado en el banquillo por si hay lesiones.

La lista de sus jugadores que podrían firmar en agencia libre son: Royce O’neal, Bol Bol, Isaiah Thomas y Thad Young.

Por si fuera poco, los picks del draft brillan por su ausencia, ya que desde ahora a 2030 solo cuentan con 2 picks, la primera ronda de este próximo draft, y un pick de segunda ronda de 2028 de Boston (protegido del 31 al 45), así que más les vale acertar con este pick.

Aún hay más restricciones, debido a estar en el segundo apron del límite salarial, también tienen restricción en los traspasos, y sólo se les permite traspasar jugadores de uno en uno, sin agregar salarios y como mucho del mismo valor, por ejemplo, si buscan traspasar a Grayson Allen, podrían traspasarlo por un jugador cuyo máximo salarial podría ser exactamente igual al salario de Allen, ni un centavo más.

Pero no todo termina aquí, lo normal para cualquier aficionado seria pensar: bueno, los Suns buscaran un traspaso por Beal ya que ha sido el que no ha funcionado de este trio anotador.

Pues no es tan fácil, como Bradley aún está con el contrato firmado en sus años en Washington, hasta el final de este contrato tiene una cláusula de no-traspaso, que le permite vetar cualquier traspaso que no vea bien para sus intereses, complicándolo todo aún más, y dejando a la gerencia de los Suns con un rompecabezas de cuidado para este verano.

Habrá que estar muy atentos al rumbo que toman estos Phoenix, desde ver si sigue el entrenador Frank Vogel, pasando por ver si Durant busca otra salida tras hipotecar a los Suns al igual que hizo con los Nets (lograron recuperar rondas de draft con el traspaso de Durant a Phoenix), además de ver si Beal acepta algún destino encontrado por la gerencia, o si, por el contrario, deciden acabar con todo y traspasar hasta a su jugador franquicia, Devin Booker, en busca de empezar de 0.

Al final, tener un big three sólo es sinónimo de luchar por el título si logras convencerles de ajustarse los salarios por el bien de tener complementos, como en su dia hizo Miami con Bosh-James-Wade, dejando margen salarial para movimientos, como el de incorporar a Ray Allen. Pero si tus tres jugadores ya casi te llegan al límite salarial, tus opciones de competir por lo más alto disminuyen mucho, ya que cada vez hay más igualdad de calidad y talento y puedes enfrentarte a Towns, Edwards, Gobert y complementos, o Jokic, Murray, Gordon y Porter Jr. mas complementos, por poner dos ejemplos de la conferencia oeste que estaban en el camino de los Suns hasta las finales.

Así que ahora, con tantos condicionantes para el futuro de la franquicia, que apostó el todo por el todo por KD y compañía, han visto cómo se van a casa tras perder los 4 partidos de primera ronda y con mil dudas sobre la mesa, por lo que esta vez y sin que sirva de precedente, SÍ, Kevin Durant desde que salió de Golden State para demostrar su grandeza, ha fracasado, siendo incapaz de liderar ningún proyecto, y los años van pasando, las oportunidades se van perdiendo y las nuevas generaciones vienen tan fuerte que si quiere ganar un anillo, parece que pasa por asumir que ha de volver a un equipo engranado y formar parte de él, no que gire en torno a él.

 ¿Cómo veis el futuro de los Suns?

¿Seguira Kevin Durant en Phoenix o pedirá salir?

¿Cuál será el próximo equipo al que hipotecará KD sin lograr resultados?

David Aguilar // @90.sink.11