Gracias Carmelo

En esta vida todo tiene un principio y un final, y aunque el desenlace nunca queremos que llegue, el paso de los años es inevitable, acercando poco a poco el final del trayecto, hasta que llega el fatídico día ponemos punto y final a un estilo de vida, donde solo nos queda el tirar de memoria o de hemeroteca para recordar los grandes momentos.  

Hoy nos toca despedir del baloncesto de élite a todo un jugador de los que marcan época, Carmelo Anthony, toda una leyenda de la NBA, que, tras 19 años, pone fin a su extensa carrera con innumerables grandes partidos a su espalda, tanto a nivel de club, como a nivel nacional con el combinado estadounidense, con el que se colgó tres oros olímpicos entre otros logros.

El baloncesto llora.

Nuestro protagonista nació en Brooklyn, y llegó a la NBA en el draft de 2003 después de salir vencedor de la NCAA con Syracuse, logro que le sirvió para recalar en los Denver Nuggets, que no dudaron en apostar por el con el pick-3 para que les guiara hasta la senda de la victoria.

Con el 15 a la espalda y su juego de anotador puro, se ganó a toda la afición de los Nuggets... y a un servidor, que se aficionó a la NBA viendo jugar a nuestro "The Special One". Aunque tengo por seguro que no soy el único seguidor de los Nuggets que empezó a animar al equipo gracias a él (lejos de Denver).

Todos sabemos que se retira sin lograr el tan preciado anillo de campeón, es más, no ha podido saborear el ambiente de unas finales de la NBA, pero ni mucho menos ha tenido una mala carrera en la mejor liga de baloncesto del mundo, sumado a que pocos jugadores son tan estéticos en su tiro de media distancia tras bote.

A su paso por la liga, ha dejado infinidad de jugadas y de partidos dignos de elogiar y recordar, sobre todo en las dos franquicias que más tiempo estuvo, como son los mencionados anteriormente, su primer equipo, los Denver Nuggets, y luego los New York Knicks, que tuvieron en Melo a una gran estrella en la gran manzana que les recuperó la ilusión por entrar y competir en Play-offs.

Un dato que deja clara su magnitud como jugador diferencia, fueron sus 10 all-stars disputados. Acontecimiento que muchos sueñan con poder llegar a disputar uno, Melo se retira contándolos con las 2 manos al completo.

Pero no solo fue una gran estrella, también asumió su cambio de rol para ayudar a los Portland TrailBlazers, dejando claro que seguía siendo un jugador muy válido para la liga, donde seguía anotando hasta meterse en el top-10 histórico, actualmente es noveno con 28.289 puntos, a tan solo 307 puntos de otra leyenda como Shaquille O’Neal.

A lo largo de su carrera, ha dejado unas estadísticas que ya quisieran muchos lograrlas, aunque sea en un partido de su vida, incluyendo en etapa de formación. Puesto que se retira con 22,5 puntos por partido, 2,7 asistencias por partido y 6,2 rebotes por partido en 1260 partidos.

Ahora falta por ver si Denver y Knicks retiran su camiseta, ya que fue pieza clave para sus proyectos, y quien sabe, si en Denver veremos dos 15 retirados, el de Anthony, y el de su heredero (y que pedazo heredero), el serbio Nikola Jokic 

Ante esta retirada oficial, personalmente solo puedo darle las gracias una y otra vez por varios motivos.

Gracias por elegir ser jugador de baloncesto, por conseguir llegar a la NBA y sobre todo por tu carisma en la cancha, convirtiéndome en un seguidor más de Denver en particular y de la NBA en general.

Gracias por convertirte en una leyenda del baloncesto e integrante de los 75 mejores jugadores de la historia en el 75 aniversario.

Gracias por tantas jugadas en las que me hacías saltar del sofá y chillar celebrándolo.

Gracias por hacerme descubrir este deporte y esta liga cruzando el charco.

Gracias por ser el primero que me hizo comprar una camiseta de un jugador (con Carmelo empezó mi colección de camisetas NBA).

 

DE BROOKLYN A LEYENDA

THANK YOU, MELO

 David Aguilar ( @90.sink.11 )